EL QUILISH: DON DE DIOS

 

“Los cristianos no miran el universo solamente como la naturaleza considerada en sí misma, sino como creación y primer Don del Amor del Señor por nosotros”, así lo señalan los Obispos Latinoamericanos que elaboraron el Documento de Santo Domingo (Nº 171), al recordar a los cristianos de América Latina su compromiso de defender el medio ambiente.

Es en este sentido que, los cristianos de Cajamarca, defendemos el Cerro Quilish, el Apu Sagrado, para la mentalidad tradicional campesina. Para la Iglesia, la evangelización parte desde la realidad, por ello se habla de la inculturación del evangelio como “un imperativo del seguimiento de Jesús y necesaria para restaurar el rostro desfigurado del mundo” (Sto. Domingo Nº 13), este “proceso de inculturación abarca el anuncio, la asimilación y la reexpresión de la fe” (Sto. Domingo Nº 256); es un proceso que supone reconocimiento de los valores que coinciden con el mensaje de Cristo, “Mediante la inculturación se busca que la sociedad descubra el carácter cristiano de estos valores, los aprecie y los mantenga la fe al encarnarse en estas culturas, debe corregir sus errores y evitar sincretismos” (Sto. Domingo Nº 230).

 

La experiencia religiosa de los cajamarquinos, está marcada por la presencia de valores culturales propios, asimilados desde la primera evangelización, sobre todo en el sector rural. Todas nuestras celebraciones religiosas mantienen palabras, gestos y símbolos propios andinos. Los campesinos siempre han sabido celebrar su fe sin renunciar a su propia visión del mundo, el cristianismo ha potenciado sus valores, como el amor a la tierra, y ha introducido otros que han dado sentido cristiano a su visión de la vida y de la muerte.

 

La defensa del Cerro Quilish ha puesto en debate dos visiones de la tierra, por un lado la de los campesinos para los cuales “La tierra, dentro del conjunto de elementos es vida, lugar de adoración a Dios, centro integrador de la vida de la comunidad. En comunión con la tierra viven y con ella conviven, a través de ella se sienten en comunión con sus antepasados y en armonía con Dios; por eso mismo la tierra, su tierra, forma parte sustancial de su experiencia religiosa y de su propio proyecto histórico...por eso hay que cuidarla, pedir permiso para sembrar y no maltratarla.” (Sto. Domingo Nº172a).

 

Por otro lado está la visión mercantilista de la Empresa Minera Yanacocha SRL y su adláteres, que “Considera la tierra en relación exclusiva con la explotación y lucro, llegando hasta el despojo y expulsión de sus legítimos dueños” (Sto. Domingo Nº 172 b).

 

Se trata de dos visiones que expresan valores culturales distintos, si la inculturación del evangelio

significa reconocer los valores que coinciden con el evangelio, entonces es una exigencia cristiana acoger y potenciar el valor de la vida presente en la visión campesina de la tierra.

 

Lo sagrado y lo profano, si bien son importantes, no se limitan a lugares y símbolos, sino que tienen que ver con actitudes fundamentales ante Dios y ante los hombres y mujeres de nuestro mundo, defender la vida es condición para un verdadero culto a Dios, ya en los primeros siglos uno de los Padres de la Iglesia, San Ireneo, recordaba a los cristianos que “la gloria de Dios es que el hombre viva.” Defender el Quilish como Cerro en que los campesinos pueden adorar a Dios, de la naturaleza reconocida como Don de Dios, es un desafío para los cristianos quienes estamos llamados a cultivar una espiritualidad, es decir a una vida según el Espíritu de Jesucristo que recupere el sentido de Dios, siempre presente en la naturaleza que nos habla de su Creador.

 

 

BREVE HISTORIA DEL QUILISH Y LA MINERIA AURIFERA

 

Allá por los inicios de los noventas de la centuria pasada, cuando Yanacocha no hacía aún uso de los favores de Montesinos para que las acciones de su socia francesa BGRM pase a los tres socios de la conquista que quedaban, ya el Quilish estaba en la mira de los depredadores de nuestros cerros. En 1993, como lo atestigua, South of the Border, una revista minera estadounidense, el Quilish estaba siendo comprado y contaba ya con once perforaciones diamantinas en sus entrañas.

 

Año a año las reservas probables y probadas han ido incrementándose, hasta situarse en los envidiables 4.2 millones de onzas con las que Minera Yanacocha pone los ojos exorbitantes de las autoridades del gobierno central. No importa que las explotaciones mineras arrasen los pueblos en su desmedido afán por expoliar sus riquezas.

 

Ni la guerra de Irak ha logrado detener el incremento del precio del oro en el mercado internacional. Cuatro punto dos millones de onzas de oro, a 355 dólares la onza, hacen la friolera cifra 1341 millones dólares.

Ni los ruegos de los campesinos que dependen de este Apu Sagrado, no solo como un lugar místico, sino del agua que allí nace y que riega sus cada vez más empobrecidas tierras, parecen detener esas ambiciones desmedidas por llevarse las doradas riquezas.

 

La Municipalidad de Cajamarca declaró zona reservada al Quilish el año 2000. La minera apeló dos veces al Poder Judicial, perdiendo ambas ocasiones. Ahora el Tribunal Constitucional, la tercera instancia de apelación, ha dado un fallo discutible que abre paso a un estudio de impacto

ambiental, contra los intereses del pueblo cajamarquino.

Cuánta protesta ciudadana ha quedado en el camino y cuánta más vendrá en el transcurso de los años, para evitar que se amenace a Cajamarca con la minería del Quilish. Cuánta corrupción nacional y local ha tenido que formarse para atentar contra este precioso recurso natural, importante fuente del agua potable de la ciudad y origen del Río Grande.

 

 

EL FUDVIMAC y El Cerro Quilish

 

El Frente Único de Defensa de la Vida y Medio Ambiente de Cajamarca (FUDVIMAC) surge un 04 de setiembre del 2002, por la voluntad firme y decidida del gobierno municipal y las numerosas instituciones del campo y la ciudad, públicas, privadas y de base; cuyos integrantes, conscientes de la álgida, trágica y lamentable situación, que durante largos años viene soportando Cajamarca; pese a las continuas denuncias de valientes ecologistas, que desafiando el poderío económico de Minera Yanacocha, le exigen el respeto a la VIDA Y MEDIO AMBIENTE DE CAJAMARCA; recibiendo como respuesta un constante ataque, tanto de minera, como de los felipillos que poniéndose al servicio del oro, no dudan en ser traidores a la noble causa del pueblo cajamarquino.

 

El FUDVIMAC tiene como objetivo, cumplir con el sagrado deber de preservar la VIDA de las presentes y futuras generaciones, el MEDIO AMBIENTE, no sólo de la ciudad, sino de toda la REGION CAJAMARCA y la DIGNIDAD del PUEBLO. Este frente es y seguirá siendo el sólido bloque del campo y la ciudad, que cual barrera, infranqueable e incorruptible, demandará siempre a Minera YANACOCHA el respeto irrestricto a la VIDA, a un AMBIENTE SANO y a la DIGNIDAD HUMANA, a través del justo trato a sus trabajadores.

 

El FUDVIMAC, defiende la no explotación del cerro Quilish, no sólo por proteger el agua que tomamos, de la terrible contaminación minera, sino porque este cerro, es considerado el SIMBOLO de la DEFENSA de todos los ACUIFEROS de la REGION.

Sabemos que esta defensa constituye una titánica lucha, comparada muy bien con la de David y Goliat; pues el FUDVIMAC cuenta sólo con el inmenso caudal de amor al terruño, emoción social y valentía de todos cuantos lo integran y su decisión de hacer frente al gigante poder del dinero, al que se rinden sumisos, los corruptos gobernantes y aquellas autoridades que olvidando que, tanto los unos como los otros, se deben íntegramente al servicio del BIENESTAR de la comunidad; se valen del CARGO para enriquecerse, no sólo con los jugosos sueldos que perciben sin vergüenza alguna ante la pobreza reinante en el país; sino que, en el colmo de la deshonestidad, venden sus conciencias al mejor postor. Tanto éstos como los ciudadanos que se vuelven traidores por el oro, deben recordar que serán juzgados por la historia y tener presente lo que dice la Santa Biblia en

Sirácides (Eclesiástico) 31,5-7: “El que ama el oro no se verá libre de pecado; el que persigue el lucero, con él se perderá”.

 

El Frente seguirá adelante porque la causa es noble y justa. Todo ciudadano consciente no dudará cumplir responsablemente con defender LA VIDA, no permitiendo la explotación del Cerro Quilish, ¡DIGAMOS NO a su explotación! y así Yanacocha no tendrá LICENCIA SOCIAL que necesita y se verá obligada a respetar al Quilish y con él ¡LA VIDA Y EL MEDIO AMBIENTE de la REGION CAJAMARCA!

 

 

BOLETÍN MENSUAL - ASOCIACIÓN PARA LA DEFENSA AMBIENTAL DE CAJAMARCA AÑO II, NUMERO 07 JUNIO / 2003

 

Responsables de Edición: Nilton Deza, Dorila Villanueva, Francisco Centurión, Luisa Zarpán.